Por: Ubaldo Tejada Guerrero
El día oficial de nacimiento de la iglesia, es el de pentecostés, la fiesta que celebraban los judíos a los 50 días después de la pascua en conmemoración de la ley dada por DIOS a Moisés en el Sinaí.
Tres cosas distinguieron a la iglesia, desde el primer día: la celebración de la Eucaristía (fraccionamiento del pan), la predicación de los apóstoles, que repetían todo lo que sabían del las enseñanzas del maestro JESÚS, la fraternidad y el amor al prójimo.
Es así como ahora los dogmas de fe tienen consecuencias sociales, así la fe de la iglesia cristiana es una fe viva que actúa, inseparable de una moral. Abarca a todo lo humano, la moral cristiana es una moral social, ya que el ser humano es un ser político que vive en sociedad en la ciudad.
Es así como ahora los dogmas de fe tienen consecuencias sociales, así la fe de la iglesia cristiana es una fe viva que actúa, inseparable de una moral. Abarca a todo lo humano, la moral cristiana es una moral social, ya que el ser humano es un ser político que vive en sociedad en la ciudad.
Desde un comienzo los cristianos en la iglesia vivieron unidos, formando una comunidad, cuyos miembros vendían sus propiedades para formar un bien de todos y lo supérfluo para darlo a los pobres, tal como CRISTO lo había pedido:
1º Comprensión evangélica, autenticamente cristiana de la pobreza.
2º Comprensión de que el pecado es el mal uso de la libertad.
3º Comprensión de que la verdadera liberación del hombre es su entrega al servicio de los demás.
4º Comprensión de no amar los bienes por si mismos y acumularlos, para sí, cuando a sus hermanos les falta.
5º Comprensión de que el cristianismo jamás ha tranzado, con ningún sistema de ordenamiento en que , el Estado pretende, derecho d dominio en el alma del hombre.
6º Comprensión de que CRISTO busca la redención del hombre, por una regeneración esencial, que lo convierte por dentro en vida abundante, total, absolutamente nueva.
7º Comprensión de que la esencia del Cristianismo es la persona de JESÜS en acción que se manifiesta:
- En inquietar.
- En mover los ánimos.
- En comunicar la vida y la verdad.
- En despertar el espíritu del hombre, mediante la predicación del PADRE y de su reino.
- En apartar a los hombres de su instalación en el "mundo" a pesar de estar en el "mundo".
- En construir el reino de DIOS en cada uno de nosotros y con cada uno de nosotros, como lo hizo desde la creación.
La doctrina social de la iglesia cristiana, no es ni una ideología, ni un sistema económico, tampoco da respuesta a todo, en todos los planos, en todos los dominios, por ejemplo: "La solución de la cuestión social está en el evangelio" o "Si todos los hombres fueron santos, no existiría el problema social".
Todo acto humano para que sea tal debe ser libre, porque debe expresar una elección y encerrar una opción sobre el tiempo y la eternidad; y es humano por que la creación es una vida en comunidad.
El ideal cristiano, es una sociedad humana, penetrada de espíritu evangélico, en la que las instituciones y las costumbres concurran al desarrollo de las almas, como una serie de exigencias morales y sociales. Así entendemos de que el principio fundamental de la moral natural es "evitar el mal y hacer el bien", "hacer a los demás, lo que quisiéramos que se os hiciera".
Persona y bien común, son los dos polos de la doctrina social de la iglesia cristiana, la concepción de una economía social humana, y por lo tanto subordinada a un bien común, humano inseparable del bien a las personas.
La iglesia cristiana militante se sitúa en un terreno espiritual, dominio de DIOS, por oposición a lo temporal que perece, dominio del César, es decir no tiene por fin directo prever o revolucionar, reformar o administrar las ciudades temporales, sino salvar a todos los hombres, que se encuentran comprometidos en ello.
- En inquietar.
- En mover los ánimos.
- En comunicar la vida y la verdad.
- En despertar el espíritu del hombre, mediante la predicación del PADRE y de su reino.
- En apartar a los hombres de su instalación en el "mundo" a pesar de estar en el "mundo".
- En construir el reino de DIOS en cada uno de nosotros y con cada uno de nosotros, como lo hizo desde la creación.
La doctrina social de la iglesia cristiana, no es ni una ideología, ni un sistema económico, tampoco da respuesta a todo, en todos los planos, en todos los dominios, por ejemplo: "La solución de la cuestión social está en el evangelio" o "Si todos los hombres fueron santos, no existiría el problema social".
Todo acto humano para que sea tal debe ser libre, porque debe expresar una elección y encerrar una opción sobre el tiempo y la eternidad; y es humano por que la creación es una vida en comunidad.
El ideal cristiano, es una sociedad humana, penetrada de espíritu evangélico, en la que las instituciones y las costumbres concurran al desarrollo de las almas, como una serie de exigencias morales y sociales. Así entendemos de que el principio fundamental de la moral natural es "evitar el mal y hacer el bien", "hacer a los demás, lo que quisiéramos que se os hiciera".
Persona y bien común, son los dos polos de la doctrina social de la iglesia cristiana, la concepción de una economía social humana, y por lo tanto subordinada a un bien común, humano inseparable del bien a las personas.
La iglesia cristiana militante se sitúa en un terreno espiritual, dominio de DIOS, por oposición a lo temporal que perece, dominio del César, es decir no tiene por fin directo prever o revolucionar, reformar o administrar las ciudades temporales, sino salvar a todos los hombres, que se encuentran comprometidos en ello.
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